La epidemia de tabaquismo es una de las mayores amenazas para la salud pública que está afrontando el mundo. Cada año, más de 8 millones de personas fallecen a causa del tabaco, más de 7 millones de estas defunciones se deben al consumo directo de tabaco y alrededor de 1,2 millones son consecuencia de la exposición de no fumadores al humo ajeno. El tabaco es perjudicial en todas sus modalidades y no existe un nivel seguro de exposición al tabaco1. Por su parte las autoridades sanitarias alertan sobre el uso común de productos de tabaco calentado (PTC), sistemas electrónicos de administración de nicotina (SEAN) y sin nicotina (SESN)- Cigarrillos electrónicos aumentando el riesgo de síntomas bronquiales y respiratorios; los productos químicos presentes en el vapor del cigarrillo electrónico dañan las células y a largo plazo pueden aumentar el riesgo de desarrollar cáncer.2
Por lo anterior la Secretaría Distrital de Salud realiza la inspección y vigilancia de la Ley 1335 de 2009 a establecimientos públicos, garantizando ambientes 100% libres de humo de tabaco. De igual manera, analiza los posibles efectos en salud por la exposición al humo de tabaco.
Por medio de la ley 1109 de 2006 Colombia adoptó el "Convenio Marco de la Organización Mundial de la Salud para el control del tabaco”, así mismo el país cuenta con la Resolución 1956 de 2008 del Ministerio de Salud y Protección Social y la Ley 1335 de 2009, las cuales adoptan las medidas necesarias para garantizar un ambiente sano y libre de humo de tabaco.